robótica educativa

LA ROBÓTICA EDUCATIVA EN LAS AULAS

En el anterior post os hablábamos de por qué la introducción a la programación y la robótica educativa es una realidad cada vez más presente en las escuelas, ya sea en horario lectivo o en actividades extraescolares. Las nuevas generaciones están interesadas por la tecnología, y es importante fomentar ese interés para que aprendan a usarla correctamente. Por eso, desde las escuelas se deben asentar unas buenas bases para que la introducción a la programación desarrolle su potencial.

La robótica educativa, por su parte, está cada día adquiriendo más protagonismo. Es una de las tecnologías emergentes con mayores posibilidades de aplicación como medio de aprendizaje y como herramienta didáctica. Desarrolla, entre muchas otras habilidades, el pensamiento computacional, con la finalidad que el alumnado pueda llegar a la solución de los retos planteados; el pensamiento crítico, fomentando la creatividad y la imaginación; la percepción del espacio, a través del tiempo u orden de acciones con el fin de ir adquiriendo conceptos de espacio-tiempo; o la resolución de problemas. Estas son habilidades imprescindibles para convertir a nuestro alumnado en ciudadanos digitales competentes, independientemente del ámbito laboral en el que se desenvuelvan en un futuro.

¿Por qué introducir la robótica y programación tan pronto?

Introducir la robótica educativa y la programación en el aula desde edades tempranas tiene muchos beneficios para el desarrollo integral de las personas. Además, la robótica educativa tiene un carácter multidisciplinar que favorece la creación de ambientes de aprendizaje y que pueden estar relacionados con los problemas del mundo real. Permite al alumnado imaginar y formular soluciones y crear nuevas ideas de una forma motivadora. El principal reto para introducir la robótica en las aulas es crear un enfoque que posibilite atender la diversidad del alumnado teniendo en cuenta los intereses, los ritmos y el estilo de aprendizaje.

¿Cómo pueden ayudarte nuestros juguetes?

WOKI

Woki es un juguete de robótica educativa que pretende asentar las bases de la programación gracias a su código de programación por colores. Con la incorporación de un tablero nivelado el alumnado puede comenzar con retos muy sencillos, hasta desafíos más complejos, consiguiendo así individualizar su propio ritmo de aprendizaje.

La escuela es un lugar de todos/as y para todos/as y por ello la intervención educativa ha de responder a la diversidad de las aulas, adaptarse a las características del alumnado, favoreciendo siempre una educación inclusiva.

ROBBIE & SOPHIE

Para el alumnado con Trastorno de Espectro Autista (TEA) los juguetes de robótica educativa como Robbie/Sophie poseen la capacidad de reproducir comportamientos sociales y gestos humanos de forma repetitiva, programable y adaptada a las necesidades de cada niño/a, considerándose por tanto una herramienta de auténtico tratamiento individualizado.

Realizar terapias con juguetes de robótica educativa como Robbie/Sophie despiertan la motivación e iniciativa que no consiguen producir los humanos, y resulta más fácil desarrollar habilidades sociales que les permiten mostrar sentimientos, trabajar la empatía y teoría de la mente y socializar con iguales. Siguiendo con el componente emocional, la robótica permite que los niños/as con TEA reconozcan emociones, las imiten y sean capaces de mantener contacto interpersonal, así como realizar contactos visuales.

MAZZY

Cuando los niños/as programan con cualquier dispositivo móvil, se generan estructuras de pensamiento, poniendo en juego su imaginación y creatividad. Por tanto, se desarrolla el pensamiento abstracto, lógico-matemático, y algorítmico. Además, contribuye a mejorar la habilidad de previsión, la comprobación de resultados, la optimización de recursos, la toma de decisiones y en resumen les enseña a pensar, todo ello en un ambiente de aprendizaje colaborativo. Mazzy es un juguete de robótica educativa que busca trabajar en el alumnado el desarrollo lógico y computacional y el uso del lenguaje de programación en bloques, adquiriendo así conocimientos de manera lúdica.

Su kit de montaje permite desarrollar habilidades óculo-manuales de enorme destreza. El hecho de poder manejar a Mazzy desde el propio robot o desde una tableta con la App instalada permite al alumnado enfrentarse a dos formas diferentes de programación. El lenguaje de programación por bloques, por su parte, permite al alumnado generar programas sin necesidad de escribir código, aprender de manera intuitiva y ser conscientes de los cambios de manera inmediata, ya que pueden ver en la pantalla la secuencia elaborada y seguidamente comprobar los movimientos con el robot.

CONCLUSIÓN

En suma, gracias a juguetes de robótica educativa como Woki, Robbie/Sophie o Mazzy de la marca Xtrem Bots, con aspecto de juguetes, el docente puede hacer que el alumnado perciba el aprendizaje como un fin lúdico y divertido, logrando así aumentar la motivación y potenciar la concentración.

SOBRE NOSOTROS

Somos fabricantes de juguetes especialistas en STEM y creemos que para aprender a programar no hace falta estar delante de una pantalla. Gracias a nuestros juguetes, enseñamos a los más pequeños los fundamentos del lenguaje del futuro de forma divertida e intuitiva. Les ayudamos a adquirir herramientas para que puedan enfrentarse a los retos del futuro.